Cuando el joven RAfael HArvey, tras egresar de la Escuela Militar inicio su carrera y fue enviado a las primeras destinaciones, se encontro con oficiales superiores que llevaban a cabo pr{acticas que le parecieron impropias o derechamente corrupta: el robo de viaticos por falsas comisiones de servicios; el uso particular de vehiculos institucionales; la circulacion de maletines con altas sumas de dinero en efectivo para el pago de actividades no contempladas en los presupuestos ofciales.