Dale Carnegie escribió este libro con el propósito de ser un suplemento a su curso sobre oratoria y relaciones humanas y nunca se imaginó que se
convertiría en un éxito de ventas y que la gente lo leería, lo criticaría y viviría según sus reglas. Carnegie entrevistó a muchas personas de renombre para tomar ejemplos de sus vidas.
Entre ellas están Edison, Franklin D. Rooselvelt y James Farley.